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En lo que sin duda es una verdadera curiosidad, se conoció que Michael Fassbender (X-Men: Apocalypse, Shame, Steve Jobs) protagonizará la secuela para Kung Fury, la comedia de acción de David Sandberg. El nominado al Premio de la Academia no es el único a bordo, dado que se supo que David Hasselhoff (Baywatch) repondrá su rol de la original.

Kung Fury es un cortometraje parcialmente financiado con una campaña de Kickstarter, que tuvo su debut en el 2015 en Cannes y que desde entonces ganó status de culto. Un homenaje a las películas policiales y de artes marciales de los años ’80, tuvo a Sandberg en el rol central, en tanto que se ocupó del guión y la dirección, tareas que volverá a desempeñar para este caso, a la vez que también producirá mediante su compañía Laser Unicorns.

Es 1985, el mejor año de todos. Miami se mantiene segura bajo el ojo vigilante de Kung Fury, el maldito policía más grande de todos los tiempos. Sus Thundercops son la fuerza policial definitiva, reunida a lo largo de la historia para derrotar al villano Kung Fuhrer, Adolf Hitler. Después de que la trágica muerte de un Thundercop lleva a que el grupo se separe, un misterioso villano emerge de las sombras para ayudar en la búsqueda del Fuhrer por obtener el arma suprema. Kung Fury debe viajar a través del tiempo y el espacio para salvar a sus amigos, defender a la prestigiosa Academia de Kung Fu de Miami y vencer al mal de una vez por todas.

David Katzenberg, Seth Grahame-Smith y Aaron Schmidt, que vienen de producir It, desempeñarán esa tarea en esta continuación, junto a Philip Westgren (Hellboy II: The Golden Army) y Conor McCaughan (Slow West, Assassin’s Creed). Bloom se hará cargo de las ventas a nivel internacional y llevará al proyecto al Mercado Cinematográfico Europeo que tendrá lugar durante el Festival de Berlín. El rodaje comenzará en los próximos meses. Suena como un título curioso al cual vincular un nombre de primera como el de Fassbender, pero habrá que esperar que sea para mejor, especialmente si se tiene en cuenta que sus esfuerzos cinematográficos en los últimos tres años estuvieron muy por debajo de las expectativas. ¿Qué tal?