Mientras aguardamos con impaciencia por la llegada de lo nuevo de John Wick tras la notable Chapter 3: Parabellum, Deadline confirmó que el ya anunciado desprendimiento de la franquicia, Ballerina, por fin ha encontrado a su director. Se trata de Len Wiseman, el cineasta que entregó obras tan cuestionables como Live Free or Die Hard, la remake de Total Recall y la saga Underworld, mismo que ha demostrado una identidad casi contraria a la de Chad Stahelski y David Leitch a la hora de encarar la acción.
Lionsgate ganó una guerra de subastas para hacerse con los derechos de este guion especulativo firmado por Shay Hatten, un asistente en la productora Team Downey -la de Robert Downey Jr.-, quien en su haber tiene escrito Maximum King!, que entró a la Lista Negra a los Mejores Bocetos no producidos por la industria del 2016. Esta contará con producción de Basil Iwanyk (Sicario, The Town), productor de los films de Baba Yaga, quien considera al boceto como una plataforma para un potencial desprendimiento de la saga de acción.
Ballerina es descrita como una suerte de La Femme Nikita (1990), de Luc Besson, pero con un enfoque más pulp e hiper-estilizado en la línea del trabajo de Quentin Tarantino y Matthew Vaughn. No hay muchos detalles del argumento, por fuera de que la historia se centra en una joven criada como una asesina, que debe dar caza a los otros asesinos que mataron a su familia. Al menos en lo que se refiere a cómo hacerla, la idea suena muy parecida a lo que es Atomic Blonde, a quien sería genial ver en un mano a mano contra John Wick. Dado que la de Charlize Theron tiene base en otro estudio, Ballerina le daría la posibilidad de hacerlo.
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