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Si HBO tiene a su The Last of Us y Amazon Prime a su Fallout, era cuestión de tiempo para que Netflix encontrara a su caballo para la incipiente competencia de adaptaciones de videojuegos. Y como es costumbre en la plataforma, la Gran N no reparó en gastos al conseguir su franquicia, pues se dio a conocer por medio de canales oficiales que comenzarán el desarrollo de varios proyectos en colaboración con Ubisoft, la más que exitosa desarrolladora francesa con sagas como Watch Dogs, Rayman, Far Cry y, la primera que tendrá su propia serie live-action, Assassins Creed.

«Estamos entusiasmados de asociarnos con Ubisoft y dar vida a la narración rica y de múltiples niveles por la que Assassin’s Creed es amada«, dijo Peter Friedlander, vicepresidente de Series Originales en Netflix, en un comunicado. “Desde sus impresionantes mundos históricos y su enorme atractivo global como una de las franquicias de videojuegos más vendidas de todos los tiempos, estamos comprometidos a crear cuidadosamente entretenimiento épico y emocionante basado en esta IP distintiva y brindar una inmersión más profunda para los fanáticos y nuestros miembros en todo el mundo«.

Con más de 40 juegos que van desde pequeñas producciones para celulares y dispositivos portatiles, como tanques de gran presupuesto para consolas y PC, la saga de Assassins Creed narra el eterno conflicto entre dos bandos: los templarios, que buscan algo llamado el Fruto del Edén para así controlar a una humanidad despojada de cualquier voluntad, y los asesinos, que desde el inicio de los tiempos están abocados a mantener la paz asesinando a hombres de poder que la empedían. A lo largo de sus entregas principales, el protagonista viaja a varias épocas históricas, desde la Revolución Francesa hasta el Renacimiento, formando parte de los eventos que moldearon la historia.

La serie live-action no es la primera que intenta llevar al videojuego de acción, aventuras y sigilo a la pantalla, pues en 2016 se estrenó la adaptación cinematográfica protagonizada por pesos pesados como Michael Fassbender (Shame, Prometheus), Marion Cotillard (Inception, Allied), Jeremy Irons (Watchmen, Die Hard with a Vengeance) y Brendan Gleeson (In Bruges, Paddington 2). Dirigida por Justin Kurzel (Macbeth), la película tuvo un discreto paso por taquilla al recaudar 240 millones de dolares a partir de un presupuesto de poco más de la mitad, con lo que rapidamente se descartó la idea de continuar a la franquicia con una posible secuela.

Por lo pronto, la serie live-action avanzará con Jason Altman (Mythic Quest: Raven’s Banquet) y Danielle Kreinik (Somewhere Between) como productores ejecutivos, y más novedades sobre el proyecto se darán a conocer durante el resto del año. Además, también se dio a conocer que en paralelo al show televisivo también se trabajará en adaptaciones animadas y hasta un animé. ¿Qué opinan?