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Legendary Pictures emitió un comunicado oficial con el que informó que llegó a un acuerdo con los herederos de Frank Herbert, que otorga derechos televisivos y cinematográficos sobre el clásico Dune. Dado que el dinero no se arroja a la basura -a menos que uno sea Jordan Belfort en The Wolf of Wall Street-, hay que suponer que el estudio planea desarrollar proyectos para la pantalla grande y chica a partir de esta novela clásica de ciencia ficción. De haber un film o una serie de TV, estos tendrán producción de Thomas Tull (The Dark Knight, Inception), Mary Parent (Pacific Rim, Godzilla) y Cale Boyter (Elf, A History of Violence), con Brian Herbert, Byron Merritt y Kim Herbert como productores ejecutivos.
Ambientada en un futuro distante, Dune narra la historia de Paul Atreides, cuya familia acepta el control de un planeta desértico llamado Arrakis. Como el único productor de un recurso de alto valor, el control de dicho mundo es muy disputado entre las familias nobles. Luego de que la suya es traicionada, Paul huye al desierto en el marco de una historia que explora tópicos varios como política, religión y la relación del hombre con la naturaleza, en tanto que él lidera una rebelión para restaurar a su familia el control de Arrakis. Herbert escribió cinco secuelas literarias a su libro original, con lo que la compañía tiene material de sobra para crear una saga cinematográfica.
David Lynch (Blue Velvet, Mulholland Drive) dirigió una adaptación en 1984, con Kyle MacLachlan en el papel central, la cual tuvo un paso pobre por la taquilla pero que es considerada una película de culto. El chileno Alejandro Jodorowsky (La Montaña Sagrada, Santa Sangre) había intentado previamente llevar adelante una transposición que se abandonó cuando caducaron los derechos, esfuerzo reflejado en el documental Jodorowsky’s Dune (2013). ¿Quién debería dirigir esta nueva versión?
