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En lo que sin duda supone otro ejemplo del cambio de paradigma del cine en general y de los proyectos de estudio en particular, Netflix le compró a Warner Bros. Pictures los derechos de distribución de Mowgli, la versión que Andy Serkis (War for the Planet of the Apes) dirigió de El Libro de la Selva. Es la mayor adquisición de una película ya finalizada por parte del gigante del streaming, una que sorprende especialmente porque el estudio ya había empezado su postergada campaña publicitaria. En vez de llegar a los cines del mundo este octubre, verá la luz en todos sus hogares durante el 2019.
Desde un punto de vista comercial, es una maniobra que tiene sentido. Netflix se ha convertido en una suerte de válvula de escape para que los estudios descarguen algunos proyectos a los que quizás les resultaría muy difícil encontrar a su público en los cines. Y no había uno más complicado que Mowgli. Más allá del calibre de su elenco y su fastuosa producción, no deja de ser otra película de The Jungle Book, una que llegará más de dos años y medio después que la de Jon Favreau en Disney, la cual supuso un rotundo éxito de crítica y taquilla. En cierto punto las dos competían para ver cuál iba a ser lanzada antes en los cines del mundo, pero una vez que fue claro que el director de Iron Man sería el primero, Warner se vio empantanada. Se le dio más tiempo a Serkis para que hiciera la mejor película posible, en el proceso se sumó el ganador del Oscar Alfonso Cuarón (Gravity, Children of Men) para darle una mano como asesor sin crédito. El estreno fijado para el 2016 pasó al 2017, después al 2018 y los ejecutivos deben haber sudado la gota gorda a sabiendas que, con estos antecedentes, era un riesgo considerable.
En diálogo con Deadline, el realizador se mostró satisfecho. «Estoy realmente entusiasmado por Mowgli en Netflix. Ahora, evitamos las comparaciones con la otra película y es un alivio el no tener esa presión. He visto la versión en 3D y es excepcional, una mirada diferente a la versión 2D, muy suntuosa y con gran profundidad, y habrá alguna especie de lanzamiento en cines para eso… Siempre se pensó como una película apta para mayores de 13 y ahora esto nos permite ir más profundo, con temas más oscuros, con la posibilidad de ser aterradores por momentos. La violencia entre animales no es gratuita, pero definitivamente está ahí. Esta forma nos permite estrenar la película sin tener que ceder en nada, expresó. Puede que quien quisiera verla en salas pueda hacerlo, en tanto que parece que se reforzaría esa idea de que será mucho más oscura. Como fuera, esto le permite acceder a una audiencia global que quizás no iría al cine para ver otra película de El Libro de la Selva, pero que indudablemente la vería en el sillón de su casa, sobre todo tratándose de un tanque de gran producción y notable elenco.
Christian Bale (The Dark Knight), Cate Blanchett (Blue Jasmine), Benedict Cumberbatch (Doctor Strange), Naomie Harris (Moonlight), Tom Hollander (Pirates of the Caribbean: At World’s End), Eddie Marsan (The World’s End), Jack Reynor (Sing Street) y Peter Mullan (Trainspotting) son quienes aportaron su talento a los personajes del libro, mientras que Rohan Chand (el chiquito de Bad Words) es Mowgli. Matthew Rhys (The Americans) y Freida Pinto (Slumdog Millionaire) son otros de los que tienen roles de carne y hueso. El Libro de la Selva, de Rudyard Kipling, fue publicado en 1894 y, entre múltiples historias con temática animal, incluye los cuentos del mencionado joven indio, quien es criado por lobos y vive entre las diferentes especies que habitan la selva.
Mezclando live-action con captura de movimiento, la historia sigue la formación del niño humano Mowgli (Chand), criado por una manada de lobos en las selvas de la India. A medida que aprende las a veces duras reglas de la jungla, bajo la tutela de un oso llamado Baloo (Serkis) y una pantera de nombre Bagheera (Bale), Mowgli es aceptado por los animales como uno de ellos. Por todos a excepción de uno: el temible tigre Shere Khan (Cumberbatch). Pero puede que haya más peligros que acechan en la selva, a medida que Mowgli se enfrenta cara a cara con sus orígenes humanos. Los otros animales centrales son Kaa, la serpiente (Blanchett); el líder de los lobos Akela (Mullan); la hiena carroñera Tabaqui (Hollander); Nisha, la loba (Harris), quien adopta al bebé Mowgli como uno de sus cachorros; su pareja Vihaan (Marsan); y el lobo hermano de Mowgli (Reynor). Callie Kloves es quien escribió el guión de este film, que cuenta con producción de su padre, Steve Kloves (Harry Potter).
