La magia del estudio Ghibli al alcance de nuestras manos

Unas líneas sobre su gran obra.

Para quienes gustamos del cine y la televisión, no hay como hacer tops de nuestras recomendaciones por género, actor o actriz favoritos, período de tiempo, director o incluso casa productora; y aunque al inicio pueda ser una tarea dolorosa, por dejar joyas fuera del recuento, es una experiencia que se disfruta. Pero rara vez ocurre que nos sea imposible hacer un listado, que sea más doloroso de lo habitual, que las razones para priorizar una película u otra sean tan diferentes que no puedas dejarlas fuera, que todas resulten en tu favorita. Esto nos ocurre con las producciones del Studio Ghibli (SG); por ello, con frecuencia, solo nos limitamos a ordenar las 21 películas en un peculiar top 21, de la que más nos gusta a la que nos agrada un poco menos.

¿Qué magia envuelve al SG que hace que amemos sus producciones? Bueno, la respuesta corta es que todas son obras de arte en términos visuales, y las que no lo son, tienen personajes singulares o narran una gran historia. Un estudio de animación mucho más sencillo que lo habitual, en el que, en lugar de computadoras y materiales tecnológicos, encontramos lápices de color y mucho papel, pues eso fue lo que le bastó para enamorarnos y acercarnos a este mundo maravilloso de la animación.

Breve historia

No se puede hablar del SG sin hacer referencia a las mentes maestras que lo fundaron: Isao Takahata y Hayao Miyazaki. Ambos artistas se conocerían y trabajarían juntos, a finales de los ’60 en el estudio Toei Animation. Pero es a inicios de los ’70 que esta dupla ganadora mostraría su gran potencial; en los estudios Nippon Animation, con obras televisivas hoy mundialmente conocidas, como Lupin III, Heidi, Marco y Ana de las tejas verdes, donde Miyazaki sería el diseñador y Takahata el director.

Miyazaki, pese a estudiar economía, siempre quiso ser un mangaka de prestigio, así pues publicó algunas obras, siendo la más importante «Nausicaä del valle del viento», en 1982, que se convertiría un par de años más tarde en la «primera» película del SG, dirigida por Miyazaki y producida por Tahakata, y aunque realmente fuera producida por Topcraft, marcaría el inicio de Ghibli Studio Animation.

Es así que en 1985 se fundaría el SG, siendo su primera película oficial El Castillo en el Cielo. Durante más de dos décadas ambos artistas intercalarían los roles de dirección y producción, además de ser guionistas de las pocas películas del estudio realizadas por otros artistas. Cabe señalar que, de las 22 películas que llevan su sello, 16 fueron escritas, dirigidas o producidas por uno o los dos genios fundadores.

El SG no solo se ha dedicado a hacer largometrajes animados, también tiene una prolija trayectoria en cortometrajes animados, comerciales televisivos y hasta videos musicales. Sin embargo, son sus películas animadas las que han dado la vuelta al mundo, se han paseado por prestigiosos festivales, han sido aclamadas por la crítica especializada y han conquistado al occidente, tan acostumbrado a productos animados más sutiles, infantiles y estéticamente más «modernos».

La mayor parte de las obras del estudio, han estado enfocada en los niños, incluyendo mensajes antibélicos o abordando temas complejos como el ser humano y la naturaleza, el progreso, el individualismo y la responsabilidad, trascendiendo los tópicos fáciles, dulces y mágicos que aparentemente envuelve el mundo de los infantes, para plantearnos un mundo más real, sin perder el surrealismo, y en el que aún la magia es responsabilidad del ser humano, y que la línea delgada de lo bueno y lo malo puede ser invisible. Por ello, el éxito del SG radica en muchos factores, que vale la pena mencionar con cierto detalle.

Animación

Es claro que Miyazaki quiso que el SG tuviera una estética y una animación propios y característicos. Los colores vivos y brillantes, la forma humana de sus personajes y la fluidez de su animación, son inconfundibles y marcan un sello de agua en cada producción del estudio. Se deja ver en Mi vecino Totoro o El viaje de Chihiro la manera exquisita en la que se mueven sus personajes, emulando movimientos corporales con fluidez y mucha gracia. Esto dice mucho de los esfuerzos de animación que a mano extienden el número de cuadros por movimiento para generar esta maravillosa estética visual. Algo que, sin duda, hace que estas producciones sean atemporales. Claro que esto es, además, una marca propia de Miyazaki.

Otro detalle notable es la forma en la que se dibuja y animan los recursos naturales, desde un apacible cielo despejado, hasta una feroz tormenta, pasando por los campos de cultivo y los bosques habitados por animales de todo tipo.

Música

Como es de esperarse de un anime japonés, la banda sonora es muy importante, y para el SG no es diferente. Las producciones del estudio tienen un acompañamiento musical perfecto para la historia que nos cuenta, sea para momentos emotivos o violentos, coloridos o sombríos, de alegrías o tristezas. Desde el opening y ending infantil de Mi vecino Totoro hasta el fabuloso y potente ending de Arrietty y el mundo de los diminutos, la música se cuida minuciosamente en cada producción.

Personajes

Desde el diseño hasta el desarrollo, los personajes de Ghibli son los indicados para conseguir el impacto que la trama quiere en el espectador. Cómo no enternecernos con las hermosas y tiernas niñas de Mi vecino Totoro, cómo no sentir empatía con la tristeza, temores e infortunios en un periodo de guerra de los pequeños hermanos en La tumba de las luciérnagas, cómo no simpatizar con los propósitos de una aguerrida princesa del bosque en La princesa Mononoke, o contagiarnos por las despreocupaciones del protagonista de Porco Rosso, solo por mencionar algunos. Los personajes, tanto principales como secundarios, son diseñados con mucho cuidado y detalle, y su desarrollo, aun en un mundo fantástico o surrealista, los acerca a ser tan humanos y reales que nos permite comulgar con ellos, compartiendo sus emociones y sentimientos.

Historia

El SG tiene una gran particularidad y es que todas sus historias son originales, es decir, no provienen de un manga previo, a excepción de Nausicaä del valle del viento -aunque el manga es de Miyazaki, así que cuenta como original-. Las historias contadas por el SG están inspiradas en eventos históricos, como El viento se levanta; en cuentos o mitos tradicionales, como El cuento de la princesa Kaguya o incluso en obras literarias occidentales, como Cuentos de Terramar y El recuerdo de Marnie.

Además, las historias Ghibli están llenas de matices, se aleja de lo políticamente correcto para mostrarnos un mundo con reacciones humanas reales, sin censuras sociales, con libertad, pero también con optimismo. Nos hablan de sueños por cumplir, de esperanza, de magia positiva, de amistades puras y de amores entrañables; pero también, no dudará en hablarnos de la guerra y sus consecuencias, de la enfermedad de personas cercanas, de desilusiones, de fracasos, de angustias, de conflictos internos y de pérdida, haciendo que cada mundo y cada historia que nos presenta se sienta más cerca de nosotros, de los jóvenes y de los niños.

Las historias Ghibli son atemporales y, me atrevería a decir, adelantadas a su tiempo. Muchas equilibran las intensiones de sus personajes, por lo que no hay malos ni buenos, solo personajes que responden a sus propios intereses y motivaciones, como La princesa Mononoke o incluso Arrietty y el mundo de los diminutos; encara problemáticas actuales como la depresión infantil, tal cual se ve en El recuerdo de Marnie y en Kiki, la aprendiz de bruja, la ausencia de identidad en Cuentos de Terramar, la discriminación social y la sobre explotación de la naturaleza en La princesa Mononoke. Pero no siendo suficiente, las películas del estudio encarnan, de manera atemporal, lo que hoy llamamos «el poder femenino». Desde Nausicaä del valle del viento hasta El cuento de la princesa Kaguya, el estudio nos ha colmado de mujeres protagonistas, fuertes, valientes, decididas, independientes y libres, compasivas, aguerridas, resilientes e incluso cálidas y enamoradizas. Pero por nada debemos pensar que esto muestra en escalas inferiores a sus personajes masculinos; todo lo contrario, se muestran a la par, logrando el tan anhelado balance y equilibrio de género.

Mención especial para Mi vecino Totoro que no solo nos muestra a unas niñas encantadoras, soñadoras y valientes, sino que además Miyazaki hace magia con la convivencia de las niñas y su padre, ante la ausencia por enfermedad de su madre. Pocas veces podemos ver una dinámica familiar tan honesta y progresista de la paternidad, un mensaje potente que viene desde 1988, de manera oportuna y pertinente a nuestras vidas hoy en 2020, cuando las mujeres estamos luchando por la igualdad y por romper con los estereotipos de roles de género tradicionalmente impuestos por la sociedad.

Podríamos escribir 1000 páginas describiendo por qué las historias del Studio Ghibli son tan especiales, y por qué todos deberíamos verlas con detenimiento; 1000 páginas describiendo qué es lo que único y especial hace a cada personaje principal y secundario; 1000 páginas para expresar lo que nos transmite la animación, cada tono en la paleta de colores, cada minucioso y fluido movimiento de sus protagonistas; pero no es necesario, pues la experiencia es única para cada persona.

No podemos negar que el SG tiene como fundador a uno de los mejores contadores de historias del mundo, se refleja en el sin fin de prestigiosos reconocimientos que ha tenido el maestro Hayao Miyazaki en sus más de 50 años de carrera. Principal defensor de la animación 2D, de carácter apacible, sencillo e inmensamente creativo, Miyazaki ha sido reconocido con el Oscar honorífico por su trayectoria como animador, el premio Winsor MacCay (Annie Award) por su trayectoria y el León de Oro a la carrera (Festival de Venecia), por sus logros en animación.

Asimismo su obra cumbre, El viaje de Chihiro ha ganado numerosos premios Annie, el Oscar a mejor película animada y el Oso de Berlín a mejor película, entre muchos otros premios que ha cosechado a nivel mundial. Hoy Miyazaki a los 79 años, después de su retiro en 2014, ha regresado para deleitarnos con un nuevo proyecto titulado ¿Cómo vives? Para ello el genio, reticente a las técnicas modernas de animación, específicamente al CGI, se ha puesto a la vanguardia y nos ofrece una obra animada en CGI. Se sabe poco del proyecto, pero dada la edad del maestro solo queda tener paciencia y esperar a que llegue en algún momento del 2021. Y por supuesto que con ansias, pues siendo de Miyazaki la calidad está garantizada.

En conclusión, el SG solo ha necesitado 21 películas para colocarse como uno de los mejores estudios del mundo. Reconocidas por la crítica como obras maestras, sus producciones son una muestra de la historia de la humanidad, un trozo de literatura hecha animación y un rezago encantador de la cultura tradicional japonesa. Con una animación atemporal, al igual que sus historias, las películas de Ghibli son el reflejo exacto de sus creadores, de sus sueños, intenciones y motivaciones, del deseo de compartir sus emociones y sentimientos, pues cada obra está hecha con amor. Puede que no te guste la animación, o que no te guste el anime, pero si te gusta el cine es imprescindible visionar las películas de este estudio, porque son arte puro.

Hasta hace poco, ver una producción de Ghibli era todo un lujo, eran difíciles de encontrar y tenías que tener mucha suerte para pescar alguna, casi siempre las más populares, por algún canal de cable. Incluso localizarlas en Internet era problemático. Sin embargo, gracias a la divina sabiduría del streaming, en este caso Netflix, tenemos el gran privilegio de disfrutar de estas maravillosas historias. La plataforma ya tiene 14 películas del estudio en su catálogo, y a inicios del mes de abril llegarán 7 más, completando así las 21. No hay excusa para dejar pasar tremendas joyas de la cinematografía mundial.

Inicié este artículo diciendo lo doloroso de un top de las mejores películas del Studio Ghibli. Así que me voy a permitir hacer una lista de siete películas del estudio que son imperdibles desde mi modesta opinión, por lo que representan en diferentes aspectos:

• Mi vecino Totoro
• El cuento de la princesa Kaguya
• El castillo ambulante
• El viaje de Chihiro
• La tumba de las luciérnagas
• Arrietty y el mundo de los diminutos
• La princesa Mononoke